Kinesiología holística
La kinesiología holística es una disciplina que aborda la salud y el bienestar desde una perspectiva integral, considerando al individuo como un todo: mente, cuerpo y espíritu. Combina principios de la kinesiología, que es el estudio del movimiento del cuerpo, con conceptos de medicina holística, que busca equilibrar todos los aspectos de la persona para promover la salud. En la kinesiología holística, se cree que el cuerpo tiene la capacidad innata de sanarse a sí mismo cuando se le proporciona el apoyo adecuado. Se utilizan técnicas de evaluación muscular para identificar desequilibrios en el cuerpo y determinar cómo afectan a la salud en general. Estos desequilibrios pueden estar relacionados con aspectos físicos, emocionales, mentales o energéticos.
Kinesiología holística
Los practicantes de la kinesiología holística pueden emplear una variedad de enfoques, que pueden incluir terapias manuales, técnicas de manipulación del cuerpo, ejercicios de rehabilitación, nutrición, acupuntura, aromaterapia, entre otros. El objetivo es restaurar el equilibrio en el cuerpo y promover la salud y el bienestar en todos los niveles. En resumen, la kinesiología holística es una forma de abordar la salud que reconoce la interconexión entre todos los aspectos del ser humano y busca promover el equilibrio y la armonía para mejorar la calidad de vida.
Kinesiología holística
Los practicantes de la kinesiología holística pueden emplear una variedad de enfoques, que pueden incluir terapias manuales, técnicas de manipulación del cuerpo, ejercicios de rehabilitación, nutrición, acupuntura, aromaterapia, entre otros. El objetivo es restaurar el equilibrio en el cuerpo y promover la salud y el bienestar en todos los niveles. En resumen, la kinesiología holística es una forma de abordar la salud que reconoce la interconexión entre todos los aspectos del ser humano y busca promover el equilibrio y la armonía para mejorar la calidad de vida.
¿Para qué sirve la kinesiología?
Kinesiología holística
Kinesiología es la ciencia que estudia el movimiento, en sensu stricto. Sin embargo esto se queda corto en la actualidad cuando se habla de kinesiología, y el campo de acción es mucho mayor.
Es una terapia natural integrativa. Se observa al individuo como un todo, sus movimientos y sus alteraciones sistémicas y orgánicas, junto con las respuestas reflejas que condicionan su tono son útiles en la valoración de la integridad del organismo en su conjunto.
Los aspectos más sencillos de comprender son los relacionados con las alteraciones biomecánicas. Aquí, al encontrar una alteración en el movimiento, podemos testar los límites de la cadena muscular y verificar los desequilibrios, para posteriormente aplicar técnicas de corrección.
Esta técnica integral fue evolucionando con los años, desde Palmer a Goodheart, Thie y otros. Por lo que hoy nos podemos encontrar con diferentes ramas de la kinesiología.
La kinesiología aplicada, en sus inicios, comprendía fundamentalmente que las alteraciones musculares. Están se entendían como pérdidas del equilibrio del sistema y eran debidas a una respuesta del organismo de forma conjunta. Al no encontrar una alteración local esto mostraba el lugar de la alteración a corregir.
¿En qué me puede ayudar esta técnica?
Si bien no existen evidencias sobre su efectividad, la kinesiología holística se recomienda en una amplia gama de condiciones
y está indicada para pacientes con problemas que incluyen:
- Dificultades de aprendizaje
- Disfunción cerebral
- Estrés y ansiedad
- Dolor crónico
- Dolores de cabeza y migrañas
- Dolores musculares
- Miedos y fobias
- Depresión
- Dolor de espalda y cuello
- Fatiga crónica
- Dificultades para dormir.
- Dificultades de aprendizaje
- Disfunción cerebral
- Estrés y ansiedad
- Dolor crónico
- Dolores de cabeza y migrañas
- Dolores musculares
- Miedos y fobias
- Depresión
- Dolor de espalda y cuello
- Fatiga crónica
- Dificultades para dormir.
Ejemplo de cómo puede ayudarme una sesión de Kinesiología Holística
Campo energético
Los desequilibrios energéticos o de información pueden estar ocasionados por causas ambientales (antenas de teléfono móvil, ondas wifi o geopatías), por un desajuste en las glándulas centrales, en el cerebelo o la propiocepción o por desequilibrios energéticos propios, como un meridiano en defecto, un vórtice energético desequilibrado o un agujero energético producido por una cicatriz. Se tratarán con técnicas como la auriculoterapia, cromoterapia, musicoterapia, digitopuntura, acupuntura, aromaterapia, flores de bach, flores triunidad, spagyria, etc .
Campo químico
En el caso de problemas químico-orgánicos o químico-nutricionales, buscamos cuáles son las deficiencias del organismo que afectan directamente al problema de la persona y se aconsejan los productos naturales y los complementos dietéticos necesarios para alcanzar la homeostasis y revertir de este modo la sintomatología. También puede existir un foco de toxemia por metales pesados, bacterias o parásitos, hongos, micotoxinas, virus, mohos que se tendrán que eliminar mediante determinados protocolos naturales, o un desequilibrio de la flora intestinal que afecte tanto la absorción de nutrientes como al sistema inmunológico.
Campo emocional
Cuando la causa es emocional se buscará si la causa es un desequilibrio del sistema nervioso por falta de nutrientes, si es una emoción no digerida que se ha quedado anclada en el inconsciente, o si es un trauma del pasado. Además se realizará el tratamiento más efectivo para la persona como pueden ser las flores de Bach, fitoterapia, aromaterapia u otras técnicas como el tapping, barrido emocional, reset emocional o terapia emocional con kinesiología.
Campo estructural
Si la causa es estructural, puede ser debido a un bloqueo articular, una contractura muscular o un espasmo visceral y se tratará con técnicas manuales para devolverle la normalidad a la estructura. Se tienen en cuenta también los desequilibrios posturales, las tensiones de la esfera craneal o el buen funcionamiento del sistema nervioso y circulatorio que tiene que irrigar las zonas afectadas.
En definitiva buscamos la raíz del problema y buscamos la forma de equilibrarlo mediante otras técnicas o complementos.